Sofía: comparto plenamente tu comentario. Yo también en la carrera de Historia experimento lo mismo que vos. El aula virtual se convierte en un depósito de información: mensajes a los alumnos, cambios de fechas de actividades presenciales, materiales de lectura obligatoria y complementaria, calificaciones de trabajos prácticos y parciales, etc..
Lo interesante sería poder superar esas inercias y, por que no, esos miedos al cambio por parte del personal docente de las cátedras.