Hola a todos. Luego de analizar detenidamente lo que nos enseña el Dr. Aras, me animo a pensar  que el problema no es tanto si los docentes hacemos uso de las nuevas tecnologías o no. Es mucho más profundo, pues no debemos perder de vista que aquéllas son instrumentos, herramientas para enseñar y aprender, como lo son los libros, la lapicera y los cuadernos. Si bien hay mucha resistencia, tal como lo explica Aras, también no es menos cierto que existe un gran problema, y es que el paradigma del docente medio es brindar información, que los alumnos "traguen", "memoricen" "puedan repetir" tal y como quiere el profe. Existe una doble resistencia a lo mismo, es la resistencia del docente a "enseñar a pensar" y de los alumnos "aprender a pensar", porque ello significa para ambos, un mayor esfuerzo, un mayor trabajo.

La resistencia que expone el Dr. Aras al menos en el medio en el que desarrollo mi tarea, es inmensa. Mientras nos estimulan a aprender a desarrollar nuevas tecnologías, nos impiden llevarlas a cabo por falta de apoyo desde la cátedra o desde la propia facultad, al no tener los medios tecnológicos ni el apoyo humano. Cuando deseamos aplicar las nuevas tecnologías que requieren de aparatos (computadoras, cañones, pizarra virtual, etc) nos vemos obligados a hacer engorrosos trámites burocráticos en horarios diferentes al dictado de clase, o bien llevar los propios, con los riesgo que implican. No obstante, considero aprender a usar este medio de alguna manera me ingeniaré para mejorar mi calidad docente en relación a mis alumnos.